MASACRE EN EL BAR “LOS DOS CHINOS”
- - Hola ..Marta?. Soy Julián.
-
S - Si claro que sé que sos Julián, como no voy a saber que sos Julian.
- - Marta, escuchame porque estoy en el Hospital, tranqui, no estoy mal, solo con unos rasguños y un ojo en compotas.
-Te explico. Esta mañana, o al mediodía, salimos de la oficina, íbamos con Clarita, Fernando y Eugenio, al Bar de la Esquina, “Los Dos Chinos” , te acordás, el de comida Oriental sobre Estrella. Fuimos a pie porque sabés que al mediodía es insufrible el trafico en el centro y encontrar estacionamiento: un suplicio, pese a que después recordé que podía haber metido el auto allí debajo de la plaza de la Democracia.
Bueno lo cierto es que llegamos al Bar, calor afuera, nos sentamos, mesa de cuatro, yo frente a Clarita y a los costados Fernando y Eugenio. Pedimos unos jugos mientras íbamos escogiendo la comida y entonces se produjo aquello.
Marta, me escuchas?. Bueno, la pared de vidrio explotó. Yo mientras miraba el rostro de terror de Clarita y Fernando, pensé, Zas! Un auto, peor aun, un carro de esos de caudales, salió de carril y atropelló la puerta de vidrio. Cuando mire hacia la calle ya buen kilombo había. Pedazos de vidrio. Los hijoeputas no sabían que alguna vez le chocarían el ventanal y los vidrios no eran inastillables. Sangre chorreando en costados y rostros de clientes sentados cerca de la ventana. Finalmente, alguien entrò de afuera y grito, “ es una bomba carajo..!”.
Luego el tipo sale corriendo y escucho que agrega “ en el basurero una bomba..”, yo ya veía venir el apretuje y el atropello de la gente al tratar de salir por la pequeña puerta y el ventanal hecho pelotas y entonces le digo a Eugenio Cesar, ¿hay una puta puerta de emergencia hacia atrás?. El compa no me dice nada y solo mira hacia atrás. Aprovecho para mirar al resto de la mesa . Clarita sostenía su bolsón, en posición de pollito mojado, viste? Fernando solo miraba hacia fuera. Estábamos nio todos cagados que otra cosa te puedo decir. Iba a decirles que tomemos nuestras cosas y atropellemos la salida cuando se produjo aquello: Primero pensé que eran relámpagos, luego recordé el calcinante sol afuera. De inmediato se escuchó la ráfaga.
Eran muchos, que te puedo decir, muchos serian 12 o 14, todos vestidos con uniformes del ejercito, pero uno cachaba que no eran milicos por las barbas que usaban y el pelo largo. Se parapetaron en las ventanas rotas y en la puerta y disparaban hacia la calle. Los hijoeputas debian ser del EPP o algo y se enfrentan a la policía afuera” alcance a decirle a Eugenio.
Nos metimos bajo la mesa. Yo sentí lo cagado y tiritantes que estaban mis acompañantes. Clarita lloraba y Fernando hacía que llamaba por teléfono pero no hacia un joraca, era que estábamos todos cagados nomas.
Que mbore, vos sabés que hacen los polis. Tiran granadas de gas lacrimógeno!. Allí adentro, Martita, era un infierno, te juro mi amor. Pero lo que sucede después es lo peor. Llegan 4 de los tipos estos ñembo guerrilleros y nos obligan a nosotros ¡ a nosotros! A levantarnos y acompañarles hasta la puerta. ¡que mbooooorre! Iban a usarnos de escudo humano, entendés?. Afuera la policía seguía disparando y por lo menos dos de estos locos también le metían con sus fusiles automáticos ráfagas a ciegas casi.
Nos hacen poner las manos atrás y nos llevan hacia la puerta. Justo pio teníamos que ser nosotros siendo que había mil millones de clientes dentro del bar. Ya íbamos a salir afuera cuando se produjo una detonación aun mas fuerte. Era otra bomba que colocaron estos ñatos y explotaba justo frente al Bar, en un Banco, que era nomas luego el objetivo.
Allí murieron muchos, no pude contar. ¿Vos te acordás, Martita, de don Evaristo, el señor aquel que tenia una Farmacia en Sajonia donde íbamos a nebulizarla a la Joaquina. Bueno ese señor murió allí, en la calle, con el hijo, el grandote medio bobo que ponía las inyecciones, te acordás? Encima llega una ambulancia justo en el momento de la explosión, se caga todo el chofer y va sobre el puesto de chipas, arrolla y hace puré de dos o tres chiperas , angà, pobre gente sacrificada.
Los terroristas estos aprovechan ese kilombo frente al banco para sacarnos afuera, adelante estaban Eugenio y Fernando, yo atrás con Clara. Estaban negociando y nos ponían el fusil sobre el hombro mirando hacia la cana mientras gritaban sus exigencias.
A mi ya me parecía muy loco el que estaba detrás de Fernando, babeaba el tipo, macoña seguro le aplicaba. Ese tipo fue el que en plena negociación, el muy loco de mierda, aprieta el gatillo y dispara contra el cura Felipe, el famoso cura de la misa televisada de los domingos, que justo estaba también saliendo del banco y parece que el tarado este le identificó. Le explotó el pecho al pa-í. Allí fue que la poli descargo toda la artillería contra nosotros, Martita, no sabés que terror se siente. De locos. No le deseo a mi peor enemigo. Por suerte estábamos atrás nosotros y nos metieron, pero los pobres Fernando y Eugenio… fueron acribillados, Marta, desfigurados quedaron. Para más habían llegado los milicos del puerto con sus armas pesadas. Mil tiros se ligaron cada uno de ellos mas o menos. Nuestros amigos, Marta. Mis hermanos, Fernando y Eugenio. Vos sabés Marta lo que es ordenar un bife con huevo con jugo de naranja y que cinco minutos después tus amigos se mueran con mil tiros y bazoocazos, indigerible nio es.
Yo no se que paso después porque nos encerraron hacia adentro y los tipos trataron de fugarse por el techo, pero había ya un tanque de guerra en la esquina y me contaron después que los tipos atropellaron el ala sur del Bar y lo derrumbaron, luego el mismo tanque les paso por encima a los terroristas estos. Para empanada dice que les dejaron.
Y bueno, yo esto acá en el sanatorio, ni se como vine a parar aquí, Martita, pero lo primero que hago es llamarte para contarte que estoy todo bien.
Martita, hola? Estas allí?
…
Al otro lado, se escuchó un suspiro, fastidiado, luego una voz – “Contame que carajos hacia Clarita, “la pollito mojado” esa, comiendo con vos.”
Cuento de Augusto dos Santos en/ The Sailors Insurgents/2.013.-
(IMAGEN: La masacre de Renatto Gusso)
No hay comentarios:
Publicar un comentario